La historia de la Señora Gabriela Peralta tiene lugar en el municipio de San Pedro Cholula, que está ubicado a hora y media de la Ciudad de México y a pocos minutos de Puebla capital, al norte colinda con los municipios de Juan C. Bonilla y Coronango, al noroeste con Cuautlancingo, al este con Puebla, al Sur con San Andrés Cholula, al suroeste con San Jerónimo Tecuanipan y al Oeste con Calpan y Huejotzingo, (Secretaría de Turismo, 2019).
Su historia como lideresa surgió en su niñez, cuando apenas contaba con 8 años de edad, la entonces niña Gabriela observaba a su abuela Doña Refugio Villegas, elaborar una loción para evitar la caída del cabello, motivada por la preocupación de familiares y amigos que se acercaban a verla para comentarle sobre sus problemas de alopecia, ante esto, Doña Refugio les prometía elaborarles dicha loción, asegurando que funcionaría y que empezarían a ver el crecimiento de su cabello al cabo del tercer mes de uso.
Y efectivamente, al cabo de las primeras semanas de probar el producto, cuenta Gabriela que la loción les traía excelentes resultados y la gente quedaba muy contenta ante tal hecho, situación que a la niña Gabriela le emocionaba y partiendo de aquellos momentos de gozo y de triunfo de su abuela, ella encontró inspiración para algún día poner la maquinaria a trabajar e industrializar aquella loción casera que Doña Refugio sabiamente elaboraba para que el mundo conociera su producto y darle un justo valor a ese conjunto de saberes y habilidades, partiendo del hecho de que Doña Refugio, lejos de poner su producto a la venta, lo daba como obsequio.
La receta tan celosamente guardada por la abuela de Gabriela, pasaría a compartirla con la Madre de Gabriela pero aquí hay un hecho interesante, y este es que la Madre de Gabriela era nuera de Doña Refugio y no su
hija, pero sabiamente compartió este conocimiento en la persona que consideró que conservaría este legado para pasar finalmente a manos de Gabriela.
Es así como nace lo que más tarde se convertiría en el Tratamiento Preserva, un producto auxiliar para el tratamiento de la alopecia de leve a moderada que asegura efectividad para el nacimiento y crecimiento del
cabello y que es el resultado de la sinergia de la herbolaria tradicional, el conocimiento científico y la tecnología innovadora en el proceso de extracción de plantas, tales como la albahaca, ortiga, nogal, romero y sábila, (PRESERVA, 2021).
Gabriela le tiene un gran amor a su producto, ella refiere que Preserva está hecho de historias, tales como las vivencias que tuvo con su abuela tras verla realizar este producto como remedio casero y preservar la fórmula
para heredarla a su madre y luego a ella, y al llegar a sus manos se dedicó a mejorar el proceso de extracción de las plantas, haciéndolo con seis plantas específicas para el cuero cabelludo y cabello, diseñó una fórmula
estandarizada, estable y logró colocarla en el mercado como un producto de alto valor clínico y medicinal.
Para Gabriela, parte de su motivación es el hecho de que su producto ayude a las personas a verse bien y sentirse mejor, las historias de éxito que le han compartido acerca del producto que fabrica, menciona que incluso médicos
y dermatólogos recomiendan sus productos, y la recomendación es el resultado de la confianza y de la comprobación de que el producto funciona.
Antes, su abuela no pudo llegar más lejos porque no tuvo las mismas oportunidades, pero se aseguró que la receta no muriera con ella y eso que hizo su abuela de confiar en la madre de Gabriela es una lección de sororidad y un legado femenino clave que llegó a Gabriela para exponenciarlo y ponerse al frente de una empresa del sector agroindustrial, el cual, según datos de la SADER, estableció tan solo que durante 2019, en México había 778 mil
mujeres trabajando en el sector primario, (Líder Empresarial, 2021).
Y fue así que su abuela y su madre le abrieron camino para iniciar este negocio, y Gabriela logra magnificar este legado para así poder industrializar el producto y llegar a más personas a través de diferentes canales de difusión y distribución, como son las redes sociales, sitios web, clínicas dermatológicas, tiendas de retail como las tiendas UNAM, así como en el comercio electrónico como lo es Amazon y Mercado Libre, definitivamente, el esfuerzo de Gabriela es incansable.
Su padre fue un gran apoyo para ella y logró que él cambiara su ideología hacia una que respetara su forma de
ser, de ver a la mujer en igualdad de condiciones.
Sin embargo, su camino no fue fácil, ella proviene de una familia de medianos ingresos que a menudo eran insuficientes, al igual que también tenían ideales muy conservadores y con un nivel de machismo arraigado
por parte de su padre, no obstante, ella reconoce que su padre fue pieza clave para forjar su carácter y su disciplina para prepararla para la vida y que posteriormente su padre fue un gran apoyo para ella y logró que él cambiara su ideología hacia una que respetara su forma de ser, de ver a la mujer en igualdad de condiciones y así poderla apoyar de una mayor y mejor forma.
Aunado a lo anterior, la Señora Gabriela logró demostrar sus capacidades, haciendo notar su alto valor intelectual más allá de los estereotipos de género, al formarse como Ingeniera Química hace más de 40 años, cuando esa carrera era liderada por hombres, siendo la única mujer en graduarse en su semestre, pero a la vez, una de las primeras personas de su generación que logró hacerse de un trabajo en la industria farmacéutica.
Ella logró vencer esos prejuicios y fue ganándose el respeto, aunque ella también reconoce que como mujer, es más difícil el reconocimiento y que las horas de trabajo a veces se duplican o incluso triplican cuando además de ser trabajadora, eres madre.
Algo que llama la atención en la historia de Gabriela es que ella comenta que fue ganando el respeto en el mundo laboral, al llegar a un “mundo de hombres” y que desde el primer día, ella, al portar overol y recorrer la planta, tuvo que soportar “chiflidos” y piropos no pedidos, lo cual era sumamente normal en aquel entonces, inclusive aún hoy en día se sigue luchando por eliminar esas prácticas machistas en los entornos laborales, en aquel entonces eran aún más normalizadas, a esto se suma el hecho de que, al ser mujer “la mujer se tiene que ganar el respeto de los hombres ”lo cual implica una doble lucha por la reivindicación de una estructura patriarcal que lo que veía como normal era que las mujeres no trabajaran y se quedaran en casa atendiendo a los hijos.
Afortunadamente, cuenta Gabriela, ella logró vencer esos prejuicios y fue ganándose el respeto, aunque también reconoce que como mujer, es más difícil el reconocimiento y las horas de trabajo a veces se duplican o incluso triplican cuando además de ser trabajadora, eres madre, en su caso, ella tuvo que privarse de la etapa de ver crecer a sus hijos, dado lo demandante de su vida laboral que exigía siempre lo mejor de ella misma.
Su proyecto logró incubarlo en la Universidad Tecnológica de Puebla, llegando a ellos a través de la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP), al igual que encontró apoyo en dependencias de gobierno que impulsaron
su proyecto, como en su momento lo fue la Secretaría de Competitividad, Trabajo y Desarrollo Económico (hoy Secretaría De Economía y Secretaría del Trabajo), por lo que las alianzas y la vinculación formaron parte esencial
de la construcción de su camino hacia el emprendimiento.
Gabriela refiere que lo más difícil para ella fue aprender a vender su producto, ya que puedes tener un producto muy bueno pero si no tienes los medios, las habilidades que se necesitan para venderlo, simplemente “se te
quedará tu producto”, se requiere de mucho trabajo, ella afirma que “primero tienes que probar, conocer el camino, si tú no te atreves una y otra vez, no lo vas a lograr, esto es como los boxeadores: te pegan y te levantas”.
La pandemia ha provocado una gran crisis que ha generado estrés en las personas, derivando en la caída del cabello y el saber que su producto ha ayudado a mejorar esta condición, sin duda es algo digno de ser celebrado.
Se ha enfrentado a desafíos muy grandes, uno de ellos ha sido el construir un equipo sólido que la acompañe en este proceso de crecimiento empresarial, ya que cuando estás en ese proceso, puedes tener las bases pero
no tienes el personal que te va ayudar a desarrollar y comercializar el producto, es necesario elegir bien a las personas, pagarles una remuneración justa, pero a la vez debes contar con un volúmen de ventas que te permita
pagarles lo que piden y desarrollar un plan de carrera adecuado.
Compaginar las labores del hogar ha sido muy difícil, pues ha sido a costa de no ver a sus hijos crecer, de hacer sacrificios para que ellos vivieran mejor, pero ella sabía que tenía que irse porque era para un bien mayor, sacar
todo adelanta y cumplir, y con esto Gabriela se refiere a que hay que estar en todo, tanto en el trabajo, como en el tiempo en casa al llegar del trabajo, atender a tus hijos, a tu esposo, estar lista siempre ese sentido de multitasking que al ser mujer das por hecho que lo tienes y por eso lo invisibilizas.
Algo clave en la motivación diaria de Gabriela es la confianza en sí misma y el preguntarse cómo puede ayudar a más personas a desarrollar sus proyectos.
Gabriela cuenta que la clave en la motivación diaria es la confianza en sí misma y el preguntarse cómo puede ayudar a más personas a desarrollar sus proyectos, el irte acompañando de otras personas que podrán
ayudarte en el camino.Ella considera como una problemática a abordar sería el hecho de que las mujeres tiendan a sentirse inseguras de sí mismas, puesto que toda esta sensación de inseguridad viene del maltrato físico o psicológico, lo cual, argumentos como este se han venido respaldando a través de todo el fenómeno de reivindicación de las mujeres en su lucha por la igualdad de género.
Para Gabriela es importante que como mujeres superemos nuestras inseguridades y nuestros miedos, ya que al hacerlo, descubriremos todo nuestro potencial y tenemos que encontrar la ayuda que requerimos para sacar lo mejor de nosotras, de ahí la importancia de hacer equipo y de crear alianzas para fortalecer nuestros vínculos y
lograr nuestros objetivos en cualquier proyecto que emprendamos.
El empoderamiento es clave, que se junten con otras personas que lo están haciendo y que lo puedes lograr al
igual que lo hizo la otra persona.
El empoderamiento es fundamental, el intercambio con otras personas que lo están haciendo y que lo puedes lograr al igual que lo hizo la otra persona,rodearte de personas que te digan cómo es el medio al que te vas a
dedicar porque sola no vas a poder, a veces la misma familia te dice que no lo hagas por miedo a que fracases, pero lo importante es aliarte, mirarte a los ojos, quitar las viejas creencias en las que la gente se guardaba su éxito
y decía “no, yo le voy a enseñar porque a mí me costó mi trabajo, que sufra”, esos pensamientos no caben más, debemos ayudarnos, para lograrlo.
Gabriela invita a todas las mujeres que quieran emprender, que se atrevan, que sí lo van a lograr, necesitan aliarse.
Gabriela invita a todas las mujeres que quieran emprender que se atrevan, que sí lo van a lograr, que necesitan aliarse, acercarse a las instituciones a los diferentes niveles de gobierno para ver qué capacitaciones te ayudarán
para echar a andar su negocio, buscar ayuda y también con otros vendedores, en las expos todos están luchando igual que tú con el objetivo de salir adelante, que te muevan tus ganas de hacer las cosas, tu esfuerzo.
Historias como la de Gabriela merecen ser contadas porque la perspectiva es distinta, y nos habla de una mujer emprendedora, que hoy día ocupa un puesto de toma de decisiones, que desafió los estereotipos de su época al
momento de decidir estudiar Ingeniería Química y ser la única mujer entre un “ejército de hombres” en la planta, con el único objetivo de sacar al mercado la fórmula del tratamiento para la alopecia que su abuela había elaborado hace ya más de 50 años.
Después de todo, Gabriela está haciendo realidad el sueño de su abuela Doña Refugio Villegas, conservando la receta original y llevándola a otro nivel, como es el de una microempresa familiar; pero que permite extender
el beneficio a muchas otras personas que necesitan de este producto para combatir la alopecia. La abuela no murió, la abuela sigue viviendo en la receta del Tratamiento Preserva.